Solo el 5,1% del total de la superficie industrial de Málaga está destinado a uso logístico. En concreto, según un estudio de Savills Aguirre Newman, de los 4.435.000 metros cuadrados de uso industrial de la capital, la superficie logística ocupa 229.000 metros cuadrados. Ante estos datos, la conclusión principal a la que ha llegado la consultora es que Málaga precisa de aumentar su suelo logístico. Sobre todo, ante las nuevas formas de comercio electrónico, que precisan de superficie de almacenaje y reparto.
Al cierre de 2020, la disponibilidad de ocupación inmediata para uso logístico era de 3.900 metros cuadrados, es decir, la tasa de disponibilidad logística en Málaga no llega al 2%. “Es necesario rehabilitar y desarrollar nuevas superficies para dar respuesta a la demanda logística, importante motor económico por los nuevos hábitos de los consumidores”, manifiesta el director de Industrial & Logistics para Málaga-Andalucía en Savills Aguirre Newman, Vicente Bernabé.
Él mismo aclara que el carácter desordenado de los diferentes polígonos creados desde los años 60 hace que su tránsito sea “poco práctico para el uso logístico por las dificultades de vehículos pesados al maniobrar”. Así, la maniobrabilidad es una de las variables más tenidas en cuenta para calificar un suelo industrial como apto para el uso logístico. “La solución pasa por facilitar esa circulación dentro de zonas industriales donde sea posible para que sean viables como instalaciones logísticas”, expone.
Infraestructuras temporales
Ante esta falta de disponibilidad logística, que deriva en una carencia de opciones de alquiler, está obligando al desarrollo de naves industriales o instalaciones prefabricadas que cubren temporalmente las necesidades logísticas de la ciudad. pueden considerarse producto logístico por contar con muelles de carga, pero que no cumplen, en la mayoría de los casos, con otros aspectos de diseño, técnicos y de calidad que se encuentran en las naves logísticas del CTM (actualmente ocupado al 100%) o del polígono Trévenez.
El informe indica que los futuros proyectos logísticos que se lleven a cabo tendrán que realizarse en las zonas de nuevo desarrollo situadas en valle del Guadalhorce, en las inmediaciones de los polígonos en funcionamiento. La consultora inmobiliaria internacional señala que el crecimiento industrial de Málaga está centrado básicamente en su zona más occidental y muestra un movimiento natural hacia el exterior.
Escasez en el suelo empresarial
La demanda de infraestructuras que favorezcan la expansión industrial en Málaga no es nueva. La Junta de Andalucía ya anunció la escasa disponibilidad de suelo empresarial en espacios productivos de la ciudad, que representa solo el 6,5% del total andaluz. En concreto, Málaga solo tiene 183,2 hectáreas (ha.) disponibles: 60,4 libres para uso tecnológico en Málaga TechPark y otras 122,8 ha.