La crisis sanitaria que padecemos está poniendo a prueba la resistencia de las estructuras empresariales, afectando especialmente a aquellas que son mayoritarias en nuestra provincia: micro y pequeñas empresas dedicadas en su mayoría a la hostelería y al turismo.
Crisis en japonés (kiki) se escribe con dos ideogramas 危 -peligro- y 機 -oportunidad-.
Como el peligro es evidente hay que centrarse en la oportunidad y esta podría ser doble: de un lado, los empresarios deberían diseccionar sus estructuras y analizar la salud de sus ramas de actividad para definitivamente abandonar aquellas que no resulten rentables y, de otro, la legislación pone a su alcance medios idóneos para capear la situación, acuerdos de refinanciación con los acreedores que hagan viable la actividad hasta la recuperación de la tan ansiada antigua normalidad.
Los medios legales están ahí, son la oportunidad, pero hay que querer aprovecharlos antes de que sea demasiado tarde.
Pablo Domínguez Muñoz
Abogado. Área de Derecho de los Negocios. Iuris Cátedra.