La Encuesta de Población Activa (EPA), después de los buenos, pero relativamente ficticios, datos que ofreció en el último trimestre, ha vuelto a traer a Málaga su realidad. La provincia cuenta con 29.100 ocupados menos que hace un año y 42.200 menos que en el trimestre anterior. La consecuencia más inmediata es la subida de la tasa de desempleo, que en Málaga ha ascendido tres puntos porcentuales en un año. En concreto, la crisis económica producida por la irrupción de la pandemia ha provocado que la tasa de paro ascienda hasta el 22,4%. Esto se traduce a un total de 176.400 personas en situación de desempleo en Málaga, 23.000 más que hace un año.
En términos porcentuales, Málaga cuenta con un 4,5% menos de ocupados que antes de durante el mismo trimestre del año pasado, justo cuando comenzó la pandemia de coronavirus. Los datos siguen sin contar a los malagueños que se encuentran en situación de ERTE. Según la delegación del Gobierno, estos ascienden a 33.927 en la última actualización de marzo. Otro de los datos publicados por la EPA ha sido el ascenso en la población inactiva, es decir, que no tiene un trabajo, pero que tampoco lo busca. En este sentido, el incremento ha sido del 2,8% hasta alcanzar las 620.000 personas, 17.000 más que hace un año.
En lo que se refiere al sexo, las mujeres siguen experimentando más situación de paro y menos de ocupación, pero la variación interanual les ha sido más favorable. Sobre todo en la segunda variable: la ocupación femenina ha descendido un 3,8% frente al 5% masculina. No obstante, los 281.000 puestos de trabajo de las mujeres distan de los 329.000 de los hombres. En cuanto a la tasa de paro, le variación interanual ha sido idéntica. Ambos sexos han experimentado un aumento del paro en un 13,1%, aunque son las mujeres las que más suman al cómputo global. En concreto, hay 8.000 mujeres más que hombres en el desempleo.