El IPC en Málaga se sitúa en el 9,4%, todavía superior a la media española de este septiembre. Esta, según los últimos datos confirmados por el INE, se ha quedado en el 8,9%, algo inferior a lo previsto hace dos semanas.
Málaga también protagoniza uno de los peores descensos del país. Si la media española se ha situado en el -0,7%, la rebaja en provincia de la Costa del Sol se ha paralizado en el -0,4%.
La causa se encuentra en el carrito de la compra. El precio de los alimentos en la provincia de Málaga experimenta la tercera mayor subida interanual de la geografía española.
En concreto, según la estadística, la inflación en el capítulo de alimentación se sitúa en Málaga en el 16,2%, solo por debajo de la de Badajoz (18,6%) y Cuenca (17,7%).
Esto quiere decir que un malagueño paga un 16% más por la compra que hace un año. La cifra es incluso superior a la registrada en ciudades como Madrid (14,3%) o Barcelona (12,6%).
Lo que más ha subido de precio han sido los combustibles líquidos (+72,7%); otros aceites (+65,9%); las harinas y otros cereales (+39,4%); la mantequilla (+33%) y la pasta (+29,6%).