¿Cómo es?
La Cala Resort, en Mijas, es un hotel lleno de encanto enfocado al golf, aunque también es perfecto para disfrutar de unos días de relax gracias a su localización, pero también por su piscina, zona de Spa, actividades como yoga o pilates… Y por supuesto por su oferta gastronómica, sobre todo desde hace unos meses, ya que ha tomado las riendas Daniel García Peinado, chef malagueño formado en turismo, nutrición y dietética, y por supuesto en cocina y gastronomía, ya que tras su paso por La Cónsula, estuvo, entre otros, con el gran Martín Berasategui, que le dio un valioso bagaje para ganar algunos concursos y ser asesor gastronómico, Chef Ejecutivo del Gourmet de la Roja y Capitán de la Selección Española de Cocina Profesional.
Daniel, debido a su completa formación, es todo un experto en la auténtica, y más saludable, Dieta Mediterránea, lo que le ha llevado a basar su cocina en torno al Aceite de Oliva Virgen Extra (AOVE), pero también a fusionarla, de manera inteligente y sensata, con influencias de medio mundo… el resultado es magnífico. Platos muy creativos, apetecibles, sabrosos, con sabores rotundos, pero también muy equilibrados, tanto desde el punto de vista gastronómico, como el nutricional. Sin duda, el futuro va por aquí.
Nos gustó por…
El entorno es muy bonito, lo que ha hecho que, además del restaurante, propiamente dicho, el hotel haya habilitado un patio y varias terrazas, para poder disfrutar de encantadores rincones con una gastronomía que está a la altura, que como ya hemos dicho, se caracteriza por recetas muy conseguidas, tanto desde el punto de vista del sabor, como de la nutrición.
Se puede comer a la carta con platos principales, pero también de tapeo, aunque la opción del menú degustación es altamente recomendable, ya que nos da la posibilidad de probar ocho platos diferentes como la delicada torrija de arbequina, tomate y anchoas, la “ostra malagueña”, en apariencia es una ostra, pero incluye concha fina, con un granizado de eneldo, jengibre, manzana… y una salsa de AOVE arbequina con notas cítrica, sin duda, un bocado que hay que probar. Los buñuelos de feria con parmesano y trufa, son ligeros, sutiles y sabores muy definidos, son otro acierto, al igual que la pluma ibérica crujiente..
Pero, para mi, el plato imprescindible es el gambón al “pimpi”con curry andaluz y pan al vapor. Muy rico y sabroso, y todo un ejemplo de lo que debe ser una cocina de fusión, y sin duda, volveré a La Cala, solo para probarlo de nuevo.
Los postres son muy apetecibles y originales, como el yogur de AOVE, hojiblanca y verdial de Málaga, con miel, polen y cacahuetes, una mezcla curiosa, que resulta muy bien, y además es ligero, como el menú en su conjunto, que nos llena, pero no deja sensación de pesadez… ¡que gran virtud!
La carta de vinos es corta pero con referencias interesantes, sobre todo de Málaga, y el servicio magnífico, muy profesional, amable pero también discreto en su justa medida. Y los precios son muy razonables, por unos 30-50 euros podemos comer perfectamente, y de manera sana y equilibrada, algo muy difícil de conseguir hoy en día.
Restaurante de La Cala Resort
30-50 euros
Calle Mirador del Golf, 1,
29649 Mijas, Málaga