El Aula del Mar empezó su andadura en 1989. Por aquellos tiempos se encontraba en unas instalaciones en el Puerto de Málaga que fueron cedidas por la Cofradía de Pescadores. Se trataba de un proyecto de unos estudiantes malagueños cuyos principales objetivos eran la interpretación, conservación y divulgación del medio marino.
Fue en el año 2012 cuando la entidad se trasladó al edificio del Palmeral de las Sorpresas, donde sigue en la actualidad. Aunque por poco tiene que cerrar sus puertas para siempre.
La llegada de la pandemia en marzo de 2020 obligó al Aula del Mar a cesar su actividad.
Con los trabajadores en ERTE y los 4.000 euros mensuales que la institución tiene que pagar de alquiler, esta entidad estuvo a punto de quedarse con sus cuentas a cero. Por suerte, gracias al apoyo de las administraciones y tras más de 20 meses cerrada, el Aula del Mar reabrió el pasado diciembre con nuevas actividades y proyectos, nuevas alianzas y con una estructura de funcionamiento más profesionalizada.
El Aula del Mar se define como “una entidad comprometida con la educación y participación en la conservación de los recursos naturales y en la mejora de la calidad ambiental y de vida”
Por un lado, desarrolla actividades de investigación científica. Por otro, ofrece a la comunidad educativa y a la ciudadanía general educación, formación y asesoramiento medioambiental a través de talleres temáticos dirigidos a los distintos cursos, itinerarios en parajes naturales, como en la desembocadura del río Guadalhorce, o paseos en barco.
Las campañas de sensibilización y concienciación, la práctica de acuicultura (la cría de especies acuáticas animales y vegetales) o el proyecto de conservación de los caballitos de mar en el mar Mediterráneo son otras de sus actividades.
El Aula del Mar también gestiona un museo temático dedicado al mar de Alborán, el Museo Alborania, que se encuentra en las mismas instalaciones del Palmeral de las Sorpresas. El Centro de Recuperación de Especies Marinas Amenazadas (CREMA) es otro de los trabajos que lleva a cabo la entidad. Junto al museo y los demás proyectos y actividades, sufrió también el parón por la precaria situación que ha vivido el Aula, lo que afectó al cuidado de estas especies.
Dedicación al mar de Alborán desde los inicios
El Museo Alborania es una de las principales actividades que lleva a cabo el Aula del Mar. También es de las más antiguas, pues se puso en marcha desde la constitución de la entidad. Aunque en aquel momento no se llamaba así, ya en las salas cedidas por la Cofradía de Pescadores se implantó una exposición permanente dedicada al mar de Alborán. Se podían ver acuarios que representaban los diferentes ecosistemas del mar de Alborán, maquetas y vitrinas con naturalizaciones de animales marinos y piezas relacionadas con la pesca, la náutica, la arqueología submarina y la acuicultura.